La moda es entendida como la influencia de los cambios políticos, sociales y económicos a nivel global, y de la representatividad en cada país. Se asocia con la evolución: la moda no es estática, siempre buscará actualizarse en función de lo que suceda en cierta temporalidad. Toda moda es historia. Para México, la moda es el relato de cómo el mexicano adopta el sentido de pertenencia a lo largo de su cronología.
Aunado a ello, el significado de la artesanía no queda muy alejado, pues, al igual que la moda, los procesos artesanales son el testimonio físico de la historia de una comunidad; representando, con sus materiales y procesos, el propio contexto en el que son creadas. Sin embargo, a diferencia de la moda, la artesanía no evoluciona a la par de la sociedad contemporánea; sino que cuenta con su propio ritmo, definido por las comunidades que le dan vida al término.
Sinergia entre moda y artesanía
Dada la similitud y divergencia de ambos conceptos, es posible entender cómo su sinergia es capaz de crear un panorama completamente nuevo en el que ambas partes pueden beneficiarse. Actualmente, se ha formado una idea más sólida del potencial creativo y artesanal que existe en el país debido al incremento del turismo, el apoyo local creciente desde la llegada de la pandemia, así como las crisis económicas con relación a la importación y exportación de productos (García, 2023). Estos fenómenos han incitado a promover y apreciar el trabajo en conjunto a partir del diseño y el potencial artesanal. Sin embargo, el panorama ha propiciado una lucha contra la apropiación cultural, pues consolida un sentimiento de orgullo al adquirir algo del país, apropiándose de su moda (García, 2023) y reflejando un alto impacto en la industria.
En este sentido, el objetivo del artículo es establecer un panorama referente a la convergencia de la moda y las artesanías mexicanas; pues se considera que, cuando la moda y la artesanía coinciden, es posible que la historia del país logre expresarse desde un lenguaje contemporáneo y adaptado a las necesidades actuales en materia de diseño, sin perder sus raíces.
Aspectos culturales y sociales en la moda artesanal en México
Donde hay sentimiento y apego hacia algo… hay pasión, y es posible la apertura de un nuevo campo para que un colectivo se distinga a través de la creatividad. En este sentido, la identidad mexicana sirve como fuente de inspiración para que pueda abrirse a experimentar distintas formas de cómo expresar su sentido de pertenencia; en el que se visibiliza una oportunidad para la moda mexicana de volverse un instrumento de identidad a través de la indumentaria.
La fusión entre artesanía y diseño permite procesos de producción más conscientes, que involucren a las y los artesanos que son dueños de dichas piezas. Estos llegan a formar parte de proyectos de diseño que fomentan el trabajo en conjunto y el impulso de la economía, tanto del diseñador, como del artesano.
El principal beneficio radica directamente en las comunidades que colaboran con el diseñador, pues adoptar el uso de las técnicas y materiales artesanales implica adaptar los procesos a las necesidades actuales del mercado; beneficiando su economía y, por lo tanto, perpetuando la preservación de la técnica artesanal que elaboran.
Ahora, si bien esta fusión tiene muchos aspectos a favor, es imprescindible mencionar que la industria de la moda lenta y sostenible se enfrenta al apetito voraz del mercado masivo, en el que los usuarios se acostumbran a pagar por moda rápida que satisface sus necesidades de inmediatez y bajo presupuesto. No obstante, las tendencias de consumo indican que, debido a la saturación que los clientes sienten con la sobreestimulación que reciben por la industria de la moda, el comportamiento del consumidor demandará mayor calidad por un precio justo, dando cabida a la moda lenta y sostenible.
A pesar de ello, cada vez son más los espacios en los que el diseño mexicano empieza a tener protagonismo a nivel internacional debido a la incorporación de los procesos artesanales. Un ejemplo de ello es la marca Casilda Mut, fundada por Clayre Coello, la cual se dedica a la creación de moda atemporal hecha en México, que integra técnicas artesanales de comunidades indígenas de los altos de Chiapas. Su presencia en la industria desde el 2010 ha buscado generar alto impacto social, económico y cultural a través de oportunidades de trabajo (Casilda Mut, 2024).
Esta forma de trabajar y diseñar redefine los estándares de producción en los que la industria de la moda se mueve actualmente. Esta incorporación hace que los procesos para producir indumentaria se ralenticen y, por lo tanto, la moda deje de ser rápida y se vuelva consciente. Abre espacio al detalle y a la calidad (por la propia naturaleza de la artesanía), así como al criterio de crear piezas con significado cultural.
La incorporación de la artesanía a la moda permite de forma natural tener un fin social y trascendental. Es prácticamente imposible combinar moda rápida con una técnica artesanal, porque allá es donde entraría la industrialización de los procesos tradicionales, cayendo en apropiación cultural e, incluso, en la destrucción de toda una historia y una tradición.
El futuro de la moda artesanal en el país
Actualmente, para México, el mercado internacional es el que se encuentra posicionado e interesado en adquirir piezas con propuesta; las cuales se traducen y adaptan a la contemporaneidad, la historia y las raíces de nuestro país. Por ello el mercado meta de gran parte de las marcas dedicadas a la creación de diseños son extranjeros (mayormente estadounidenses y europeos). No obstante, siguiendo con la idea de que las tendencias apuntan a la formación de mercados más conscientes de lo que consumen, poco a poco la moda mexicana con enfoque lento y sostenible va teniendo un futuro más visible en el panorama. La realización de dicha premisa sería capaz de convertir a la moda en una industria consciente, en materia de reconocimiento del trabajo, salarios justos y crecimiento de las comunidades.
En un mundo en el que todo sucede con tanta rapidez, la moda artesanal permite apreciar los detalles, los lazos formados y el intercambio de información que puede existir dentro del diseño. Valorar la artesanía y considerar el impacto de las decisiones de consumo en la industria de la moda, fomenta procesos de producción adecuado, generando un alto impacto social y contribuyendo a la preservación de las técnicas artesanales de las comunidades.
Al elegir productos que integran estos valores, se apoya al desarrollo sostenible y a revalorar la cultura.
Referencias
García, L. (19 de marzo 2023). Ahora hay un sentimiento de orgullo al comprar algo del país»: así es como México se apropió de su moda para luchar contra la apropiación cultural. El país. https://elpais.com/smoda/moda/ahora-hay-un-sentimiento-de-orgullo-al-comprar-algo-del-pais-asi-es-como-mexico-se-apropio-de-su-moda-para-luchar-contra-la-apropiacion-cultural.html
Casilda Mut (2024). Identidad. https://www.casildamut.com.mx/pages/identidad