Fundación Hogares
Entrevista al arquitecto José Roberto Lagunes Trejo, coordinador del área operativa de Fundación Hogares.
En esta ocasión, dentro del marco del Congreso Internacional BIÓSPHERA efectuada los pasados días 7, 8 y 9 de febrero del 2023 en el Centro de Convenciones Yucatán Siglo XXI, tuve la gran oportunidad de platicar con el arquitecto Lagunes Trejo.
El objetivo de Fundación Hogares
Fundación Hogares nace hace 12 años, con la intención de generar capacidades en las personas para que puedan identificar sus necesidades e involucrarse en todo el proceso de resolverlas, es decir, entender cuáles son las amenazas y los riesgos, pero también las oportunidades. Estamos en los 32 estados de la república, tenemos presencia principalmente en territorios de vivienda social, pues es nuestro ámbito de trabajo, aunque colaboramos también en temas de asentamientos humanos irregulares y en colonias populares.
El proyecto Zumpango
En los últimos años hemos trabajado en la recuperación de espacios residuales, espacios abandonados. Un caso que ya lleva más de 10 años es la recuperación de un lote baldío en Zumpango en el Estado de México. Es una unidad habitacional que se llama Arbolada los Sauces; la población que vive ahí son personas que perciben de 1 a 2 salarios mínimos.
El espacio funcionaba básicamente como un tiradero de basura, generando vacíos urbanos, condiciones de inseguridad, erosión del suelo y efecto de isla de calor; lo que hizo el grupo de vecinas a través de la organización comunitaria, fue recuperar el espacio, limpiarlo y convertirlo en un huerto urbano.
Esto fue muy importante para ellas desde el punto de vista de la seguridad alimentaria, pues se les brinda la oportunidad de producir sus propios alimentos, dando mayor seguridad a sus familias y combatiendo la desnutrición. Hoy por hoy, las vecinas consumen lo que producen, que ya consiste en todo tipo de hortalizas, como acelgas, espinacas, coliflor, alcachofa, etc.
Es un proyecto que se ha hecho por etapas; ahora mismo ya se cuenta con una cocina comunitaria, recuperada a partir de una caseta de vigilancia donde algunas personas practicaban actividades riesgosas: se limpió la caseta y, a través de un acuerdo con el municipio, se convirtió en cocina comunitaria, alimentada de gas a partir de un biodigestor, para que con la materia de la composta del propio huerto las vecinas pueden cocinar. Este espacio se ha vuelto un nodo comunitario.
Han sido muchos años de diferentes alianzas, tanto con el sector privado como con el público, pues se trata de un proyecto a largo plazo que trasciende administraciones a partir de generar grupos de vecinas y vecinos organizados, con conciencia colectiva de cuidado del medio ambiente y de seguridad alimentaria, pero, en especial, de apropiación: este espacio es mío, yo lo recuperé, entonces, yo lo voy a cuidar, yo lo voy a mantener. Se genera ese compromiso y esa ciudadanía en las personas a partir de involucrarlos desde el momento cero.
Son 2,300 m2 de espacio, donde se han forestado más de 80 especies entre aguacate, limón, magnolia y jacaranda. Estamos hablando de un espacio urbano donde lo que buscamos es emular la naturaleza y regresarle eso que le quitamos por la urbanización.
¿Cuál es el proceso para que los ciudadanos puedan acercarse a ustedes?
Tenemos todas nuestras redes de comunicación abiertos, nuestra página web es www.fundacionhogares.org y las redes sociales son @fundhogares
Pueden mandar un mensaje por ahí o acercarse a los correos de contacto que aparecen en la página. La idea es ver de qué manera nosotros podemos conectarlos con un proyecto que esté andando dentro de la fundación, para los que tengamos fondos, o también buscar de qué manera generar alianzas. Tenemos una cartera de más de 300 aliados, entre empresas, sector público, financieras, donantes particulares y demás. A partir del conocimiento de 12 años ya sabemos cómo canalizar el tipo de proyecto que tú necesitas.
Es importante mencionar que principalmente trabajamos con las personas en lo colectivo, porque muchas veces se acercan como individuales (mi casa, mi parque) pero siempre nos gusta llegar a un grupo que esté parcialmente formado o nosotros, dentro de nuestros programas, generar esta formación de un grupo comunitario que quede al frente del proyecto. No siempre las necesidades individuales son las mismas que las colectivas y, para generar un bienestar social, es importante escuchar la voz de todos.
Es un modelo de seis pasos, en los que los dos primeros tienen que ver con un diagnóstico con la comunidad, para después generar un plan de acción en donde ellos son copartícipes, co-diseñan sus acciones y les queda una hoja de ruta. Posteriormente, se lleva a cabo un seguimiento a distancia en la evaluación. Es importante para nosotros medir nuestras intervenciones, pues solo midiendo podemos avanzar a una mejora continua.
Estamos abiertos a que, tanto la comunidad como las organizaciones, se sumen a través de un proyecto, donativo o alianza.
No siempre las necesidades individuales son las mismas que las colectivas y, para generar un bienestar social, es importante escuchar la voz de todos. – Arq. José Roberto Lagunes Trejo