El proceso de crecimiento urbano ha ejercido una alta presión sobre la ciudad de Mérida. Al interior del anillo periférico se ha concentrado una diversidad de equipamientos, servicios y oportunidades laborales que hacen que los asentamientos periféricos dependan de la ciudad central provocando, a su vez, problemas como la congestión vehicular, la ineficiencia del transporte público, la falta de oportunidades y la desigualdad en el acceso a satisfactores urbanos.
Ante este panorama, la generación de subcentros urbanos se vuelve relevante en la formación de una ciudad policéntrica, que diluya la dependencia de la ciudad central.
La vida cotidiana y su relación con el espacio urbano
Para entender la importancia de los subcentros urbanos, primero se deben abordar las relaciones espaciales que las sociedades urbanas han generado con la ciudad. En la vida cotidiana se realizan actividades para satisfacer cuatro esferas de necesidades: la esfera productiva, relacionada con el trabajo y el empleo; la esfera reproductiva, relativa a actividades domésticas vinculadas a la vivienda, nutrición, vestido y cuidado; la esfera propia, relacionada con el desarrollo personal e intelectual individual; y la esfera política, relacionada con la vida en comunidad y la participación social. (1)
Ir a trabajar, estudiar, salir a divertirse o convivir con los vecinos son actividades que conforman el día a día de cada persona, y esas acciones no se dan de manera aleatoria ni en un espacio virtual, sino que se alojan en diversos espacios, tanto públicos como privados, que son receptores de la vida cotidiana.
Proximidad y calidad de vida en el entorno urbano
A diferencia de la ciudad monocéntrica, donde los espacios receptores de la vida cotidiana se vuelven cada vez más distantes a medida que la ciudad crece, la ciudad policéntrica promueve la generación de subcentros urbanos, donde la proximidad, la diversidad de usos de suelo y la densidad permiten mejorar la calidad de vida.
De ahí la importancia de fortalecer los subcentros urbanos, pues la proximidad asegura el acceso a aquellos lugares que nos permiten satisfacer nuestras necesidades básicas.
Medida en aspectos cuantitativos como el tiempo y la distancia, se han generado modelos como “la ciudad de los 15 minutos” y se han establecido escalas de proximidad consideradas ideales, que se pueden recorrer a pie, en bicicleta o en transporte público. Así, tenemos la vecinal a 5 minutos de la vivienda, o hasta 500 metros de distancia; la barrial a 10 minutos, o hasta 800 metros; y la supra-barrial, de 20 minutos de recorrido o hasta 1300/1500 metros de distancia.
La proximidad funciona gracias a los factores de diversidad y densidad. Mientras más población se encuentre cercana a un equipamiento o servicio, el radio de cobertura de este se amplía; asimismo, mientras más diversos y mixtos sean los destinos y usos del suelo en una zona, mayor será la oferta de servicios y satisfactores urbanos disponibles. Por ende, la relación de estos tres elementos y su capacidad para sostener la vida urbana son factores determinantes para asegurar la calidad de vida de la población que habita en las áreas suburbanas.
Un ejemplo de esto: el fraccionamiento Los Héroes
Para aterrizar a un ejemplo concreto en Mérida, podemos mencionar un subcentro urbano que se ha ido fortaleciendo y consolidando en los últimos años: el fraccionamiento “Los Héroes” de la desarrolladora Grupo SADASI. El fraccionamiento, además de ofrecer diversos espacios y tipologías de vivienda, ha ido consolidando diversos equipamientos y servicios para el disfrute y mejora de la calidad de vida de los habitantes.
En Los Héroes, los usos de suelo mixtos que combinan vivienda y comercio al por menor, ofrecen a los habitantes una gran cantidad de servicios en una escala vecinal y barrial, así como una forma de autoempleo. Asimismo, se encuentran equipamientos fundamentales como escuelas primaria, secundaria y preparatoria, y espacios deportivos como las canchas de tenis o los parques vecinales. Entre los equipamientos más destacables por su importancia y radio de cobertura están el supermercado y la Unidad Médica Familiar #61 IMSS Los Héroes, que hacen que abastecerse y acceder a servicios de salud sea más accesible.
Complementando la gran cantidad de equipamientos y servicios, Grupo SADASI, en el desarrollo del fraccionamiento, ha implementado calles amplias y aceras con elementos de accesibilidad universal como rampas. Esto, en conjunto con las calles cerradas y peatonales, permite desplazamientos más amigables para el peatón, los ciclistas y el acceso del transporte público.
Estos elementos presentes en los subcentros urbanos fortalecen la calidad de vida y el desarrollo pleno de los habitantes. Vivir y experimentar la ciudad en espacios de proximidad, además de satisfacer las necesidades individuales, también permite conocer y convivir con la comunidad y las personas con las que se habita, forjando lazos y un tejido social más sólido y colaborativo.
Así, el fraccionamiento Los Héroes es un ejemplo claro de un subcentro urbano que contribuye a la descentralización y permite un desarrollo funcional, pues cuenta con centros de trabajo, equipamientos, servicios, supermercados e, incluso, una Unidad Médica de alto impacto, como lo es el IMSS.
(1) Ciocoletto, A. & Col·lectiu Punt 6. (2016). Espacios para la vida cotidiana. Auditoría de calidad urbana con perspectiva de género. https://issuu.com/punt6/docs/espaciosparalavidacotidiana
